Ya nos encontramos en la recta final, se acaba otro curso, y quedan los últimos exámenes.

Es importante que durante el curso se haya realizado un trabajo constante y diario para que luego no tengamos que estudiar todo de golpe y que resulte agobiante y estresante.

 A continuación vamos a facilitar una serie de consejos:

  • Debemos aprender a relajarnos. Podemos practicar ejercicios de relajación que resultan muy fáciles y no requieran de mucho tiempo. Realizaremos respiraciones profundas, cerrando los ojos y con música de fondo, mientras podemos imaginarnos en un ambiente que nos resulte relajante y placentero.

  • A la hora de ponernos a estudiar es bueno que gestionemos bien el tiempo, y muy importante que hagamos los descansos necesarios cada dos horas entre 10-15 minutos aproximadamente.

  • Muy importante realizar un planning de trabajo.

  • A la hora de memorizar un buen método que utilizamos por su eficacia es la realización de mapas mentales, partimos de una idea, un enfoque principal que simbolizaría la idea principal, y a partir de esa idea iremos extrayendo otras bifurcaciones con las ideas secundarias.

  • Realizar una asociación de ideas también facilita la memorización.

  • Memorizar jugando. En este sentido el estudio lo podemos considerar una dedicación y no una obligación y por tanto no sea un esfuerzo.

  • Muy importante trabajar los pensamientos positivos “estoy estudiando y voy a sacar muy buenas notas”, es imprescindible ayudar al niño o adolescente a trabajar estos pensamientos, debemos motivarles, reforzarles. Pensamientos negativos como “no voy a aprobar, es imposible, no soy capaz” dificultan y obstaculizan la capacidad de memorización.

Mucha suerte y que obtengáis muy buenos resultados.