Descubre cómo ahorrar en la cesta de la compra sin renunciar a nada ni comprar productos de calidad inferior.

El gasto en la compra se lleva un buen pellizco del presupuesto de la economía doméstica; a todos nos interesa gastar un poco menos en este apartado. Con estos sencillos consejos conseguirás controlar el gasto y ahorrar.

1.- Fija un presupuesto semanal: Es importante que tengas previsto el gasto a hacer en la compra, así no habrá sorpresas.

2.-Repasa la despensa: Sabrás qué te falta y no comprarás de más. Es conveniente que la despensa esté siempre bien organizada, para saber qué productos hay que reponer de un sólo vistazo.

3.-Haz una lista: Tan importante como repasar la despensa es hacer la lista de la compra, te evitarás comprar lo que no necesitas y olvidar lo que sí necesitas, esto te haría volver al súper y puede que piques en otra cosa más que no pensabas comprar.

4.-Planifica menús semanales: planificando controlarás el gasto, y te será muy útil. Al principio puede parecer un rollo, eso de ponerte a pensar tantas comidas de una sola vez, pero después lo agradecerás, sobre todo si tienes hijos que comen en casa.

5.-Productos de temporada: Las verduras y frutas de temporada son más baratas, y además están más ricas y sabrosas, aprovéchalas.

6.- Elige el supermercado con mejor nivel de precios. Es posible ahorrar en tu cesta de la compra, simplemente, eligiendo comprar en establecimientos con un buen nivel de precio. Según los cálculos de los expertos de OCU, el ahorro medio anual para una cesta de la compra estándar (la cesta OCU) es de más de 900 euros, sin renunciar a nada.

7.- Ojo con las ofertas familiares. Los supermercados a menudo te tientan con ofertas tipo 3×2, 2×1, packs familiares, «envases ahorro», un 20% más gratis… No pienses que comprar sistemáticamente este tipo de ofertas es la mejor manera de ahorrar, porque no es así.

8.-Compra congelados: Las verduras que no son de temporada las encontraremos a mejor precio congeladas, conservan todas sus propiedades; ocurre lo mismo con el pescado; los productos congelados son una estupenda opción.

9.- No compres «productos con apellido». No es lo mismo una mermelada, que una mermelada «casera».

10.-Marcas blancas: Las marcas blancas suponen un ahorro en la compra, a veces son  productos de primeras marcas, tanto de alimentación como de limpieza o productos de higiene y aseo.

11.-Congela después de cocinar, ahorras tiempo y dinero, es una gozada abrir el congelador y tener ya la comida lista.

12.- Ofertas de última hora: En muchos supermercados y puestos de mercados, rebajan los precios de los productos frescos a última hora, una o dos horas antes del cierre.

13.-Si puedes, ve sin niños: en los supermercados hay muchos productos tentadores para ellos. Los niños se suelen cansar, tienden a ponerse nerviosos y acabamos comprándoles sus caprichos.

14.- Haz la compra sin hambre. Está demostrado que ir a comprar con hambre hace que piques en productos que no son necesarios ni pensabas comprar.